23 nov 2009
Estados Unidos... Un Aliado Peligroso
!Por la Revolución de las Ideas!
“Es peligroso ser enemigo de Estados Unidos, pero ser amigo es fatal” Henrry Kissinger
¿Qué pensaría el doctor Álvaro Uribe, y el pueblo colombiano en general, ante la afirmación del honorable político estadounidense Henrry Kissinger quien se desempeñó como consejero presidencial y del pentágono y quien además en 1973 fue premio Nóbel de paz?
Sin duda alguna la frase viene como anillo al dedo para Colombia, teniendo en cuenta que los lazos de amistad entre los dos países se hacen cada vez más fuertes. Las preguntas que ahora surgen son muchas, pero como el papel y el lápiz impiden extendernos, en este artículo haremos y desarrollaremos una sola pregunta ¿Qué tan provechosa ha resultado esta unión para mejorar la crisis con Venezuela, que es sin duda el más grave problema que enfrenta Colombia hoy y que se agudizó aún más con la puesta en marcha de bases norteamericanas en territorio colombiano?
Este problema binacional no sólo nos ha traído inseguridad en la frontera: colombianos asesinados y detenidos, investigaciones inconclusas y no satisfactorias frente a estos hechos, supuesta presencia de las FARC en Venezuela, lenguaje belicista por parte del presidente Chávez, sino que además, y como si fuera poco, la semana pasada nos sorprendieron con la voladura de los puentes fronterizos en el Táchira. Quién sabe con qué otros actos agresivos, provocadores y burdos nos seguirán sorprendiendo. ¿Será concebible todo esto? Y aún más ¿Será concebible la disimulada frialdad que el gobierno americano ha adoptado ante la delicada situación?
Lo preocupante del asunto es que Venezuela no se va a detener por ahora y vendrán más actos agresivos sencillamente porque todo esto hace parte de la escalada fronteriza en la que está empeñado Chávez y que usa como cortina de humo para ocultar o minimizar la situación interna de su país que se deteriora cada vez más; y mientras tanto, la comunidad internacional junto con el gobierno americano prefieren permanecer callados, alejados y neutrales.
Frente a los insultos, amenazas de guerra y actos provocadores del presidente Chávez, resulta triste, indignante y sorprendente, la actitud de nuestro gran aliado que no sólo se hace el de la vista gorda, sino que además pretende que tanto Venezuela como Colombia manejen el mismo lenguaje, cuando lo único que ha hecho Colombia y su gobierno es manejar la prudencia y no darle importancia a palabras que no ameritan ninguna consideración. En Colombia nuestro presidente está en lo que está y lo último que haría sería rebajarse al nivel retórico de su homólogo venezolano.
Como si fuera poco y mientras Colombia soporta calladamente tantos abusos e insultos, funcionarios norteamericanos en Venezuela andan diciendo que desean mejorar su relación con el gobierno de Chávez, ¿Qué es esto?; adicional a lo anterior, la semana pasada se supo que algunos congresistas demócratas le solicitaron al presidente Obama recortar la ayuda militar a Colombia y como si no les hubiera bastado con sacarle el cuerpo al TLC también andan aconsejando no visitar Colombia por peligrosa, amenazando así, nuestro turismo; y si esto es lo que se dice y de lo que a medias logra enterarse el pueblo colombiano, no me imagino todo lo que se teje de puertas para dentro en la Casa Blanca y que muy posiblemente nunca saldrá, o por lo menos se tardará en salir a la luz pública.
Creo que nos están clavando el puñal por la espalda disimuladamente para finalmente decir que nunca fuimos aptos para convertirnos en sus socios y/o amigos y/o aliados. Por algo Henrry Kissinger dijo lo que dijo y por algo nuestro canciller lo ratifica: “Estados Unidos y la comunidad internacional suelen ser generosos en expresar solidaridad cuando hay víctimas, sin embargo en cooperación eficaz es muy escaso”.
Pero mientras descubrimos qué tan costosa nos sale esta alianza, debemos centrarnos en el más grave problema de política exterior que ha enfrentado Colombia en los últimos años con el régimen chavista. La diplomacia y la tolerancia han sido una muy buena estrategia pero no es suficiente cuando se trata de defender a la población civil de actos agresivos y menos cuando se quiere mejorar, o mejor, eliminar el deterioro continuo de la calidad de vida urbana a causa de problemas entre países vecinos y hermanos.
Esperamos todos los colombianos que Estados unidos no pretenda hacer con nuestro país lo que hizo hace algunos años con China y con países centroamericanos que jamás recibieron la ayuda postconflicto prometida; sino que por el contrario fueron totalmente abandonados, luego de que se convirtieran en supuestos aliados del país del norte, terminaron fue colgados
Columnista Invitado
Dancas
www.latribunacolus.blogspot.com
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estoy de acuerdo con el articulo ya que los gringos le muestran una cara a sus aliados y amigos y a espaldas en tierran el cuchillo.
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