Como si se tratase de otro episodio más en donde Colombia queda mal o
queda eliminada por un autogol, esta vez no fue un jugador el del auto gol,
esta vez fue el Bolillo Gómez quien en un acto descalificador golpeo a una
mujer en un bar de la ciudad de Bogotá. Lo grave no es que una mujer haya sido golpeada,
sino que quien lo hizo es el técnico de la selección Colombia. Un técnico quién
está llamado a dar buen ejemplo, más no actos de esta índole que no solo son
bochornosos, sino sacados de una película de Víctor Gaviria.
La contienda boxística inició a las 2:00 a.m en el bar Bembé, en el
barrio La Macarena. El ‘Bolillo’ Gómez salió del lugar con los ojos rojos. No
sabemos qué sustancias habría injerido, o peor aun, si estaba borracho, o
totalmente ido. Lo único cierto es que de un momento a otro el púgil Bolillo procedió
a lanzarle un puñetazo a la mujer, quién
alegaba que quería seguir en el bar bailando Salsa. Bolillo lanzo ataques verbales seguidos de golpes a la
mujer. Según Bolillo, la mujer era una perra, al menos ese fue el vocabulario
usado por Bolillo Gómez al referirse a la mujer de acuerdo a los testigos presentes en el lugar. Este
comportamiento es censurable, debido a que es una mujer y nadie tiene porque
maltratar a una persona independiente al comportamiento de la misma. Golpear a
una mujer es el peor acto de cobardía y falta de hombría que yo puedo conocer.
Por ende, la decisión de separarlo del equipo fue la mejor y así se debe
quedar. Adicional al acto de golpear a la mujer, Gómez procedió a iniciar una riña
con las personas del lugar, especialmente con quien cuidaba los carros del
establecimiento. Primero fue su adversario, y después le pago dinero para que
lo protegiera de la muchedumbre que quería lincharlo. Al final logro escapar de
su ring de boxeo, pero dejando una pésima imagen.
La única forma que podemos calificar este acto es con un solo adjetivo; ¡Descalificador!
Este acto es un verdadero autogol, tal vez comparable con el autogol de Andrés Escobar con relación a las consecuencias y mala imagen que dejo el siniestro
desenlace posterior al autogol de Escobar. La verdad no podemos entender como
este sujeto pudo haber cometido semejante acto, y peor aún, golpear a una
mujer. Lo único cierto es que su decisión de renunciar fue la mejor. Lo que no
entiendo es porque algunos directivos y jugadores están apoyando a este
personaje para que vuelva a la selección. Es inaceptable que vuelva y más
cuando ha puesto en ridículo al país entero con su comportamiento. En realidad, vergüenza
le debería dar a la federación pretender mantener a este señor en la dirección de
la selección. Cualquiera que sea el interés es claro que debe primar el interés
nacional. Con este acto, el ciclo de Gómez en la selección ha terminado, es
hora de dar un paso al costado y dar paso a una nueva generación de técnicos, y
porque no, un técnico extranjero. Yo en mi caso prefiero a Leonel Álvarez en la
selección. Leonel conoce al equipo y los jugadores, este puede darle un toque
personal que nos puede llevar a triunfar y salir del letargo del juego lateral
que nos ha hecho fracasar tantas veces.
El auto gol de Bolillo es realmente un absurdo futbolístico, pero bueno
es otro más de esos fracasos por fuera de la cancha que nos da una muestra más
del porque fuimos eliminados del mundial USA 94 y porque se ha fracasado tantas
veces. Si ese es el ejemplo que dan los técnicos de la selección mayor, ¿que se
le puede pedir a un jugador? Ósea, el ejemplo empieza por casa y queda muy mal
que ahora se pretenda devolver a este señor a la selección. Ósea, por favor, señores
directivos, un poco mas de cordura y manejo administrativo. Cometió un error,
lo reconoció, dio un paso al costado y ahí debe terminar esta historia. Se debe
dar ejemplo y seleccionar un técnico nuevo. Leonel Álvarez llena
las expectativas que requiere el país y es claro que puede ser una opción para reemplazar a Gomez.
Entonces, mas allá del comportamiento descalificador de Gómez, y su
salida del equipo, es hora de seguir adelante y encontrar una solución, la cual
no es precisamente devolverlo al cargo.
Cristhian Mancera Mejía
Director
LaTribunacolus
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